Hay cuatro fases del ciclo de vida de un producto.
En el sector manufacturero, es importante saber exactamente por qué se hace lo que se hace y no dejar nada al azar. Se invierten demasiados recursos en todo el proceso de fabricación como para tomarlo con ligereza. Esto significa que es necesario planificar adecuadamente lo que se quiere crear y asegurarse de plantear las preguntas correctas durante todo el ciclo de vida del producto.
Centrarse en su producto de forma aislada no le bastará; necesitará conocer a fondo a sus clientes, sus necesidades, demandas, dificultades y deseos. Cuanto mejor los comprenda, más fácil será crear un producto que compren una y otra vez.
Comprender el mercado también le ayuda a generar elasticidad de fabricación según las demandas previstas. No hay nada peor que quedarse atascado con un almacén lleno de productos que ya no necesitan o requieren sus clientes. Sobre todo si es evitable.
Al analizar los productos que creas, surge un patrón. Este patrón suele tener forma de campana: creas un producto, experimenta un rápido crecimiento y, posteriormente, las ventas se estabilizan, se ralentizan o disminuyen. Esta campana cuenta la historia completa del ciclo de vida de un producto.
Para ayudarle a pronosticar y predecir la forma de esta curva de campana en la fabricación de productos, muchas empresas adoptan un método llamado Gestión del Ciclo de Vida del Producto. Este proceso puede utilizarse tanto para marketing como para ventas.
En la Gestión del Ciclo de Vida del Producto, el enfoque de marketing de un producto se divide en cuatro etapas: introducción, crecimiento, madurez y declive. Cuando el ciclo de vida del producto se basa en el volumen de ventas, la introducción y el crecimiento suelen convertirse en una sola etapa.
Necesitas hacer preguntas
Para comprender plenamente el ciclo de vida del producto, es fundamental plantearse preguntas constantemente. Sin embargo, no todas las etapas del ciclo de vida de un producto requieren el mismo tipo de preguntas. En la primera etapa, se buscarán respuestas sobre el valor del producto y la audiencia ideal. A medida que avance en el ciclo de vida del producto, se necesitarán respuestas sobre la mejora del producto y el control de calidad.
Las cuatro etapas se centran aproximadamente en lo siguiente:
【Fase 1】Introducción: Reconocer la necesidad de cambio y el valor que nuestro producto puede aportar al mercado.
En primer lugar, todos los involucrados deberán comprender qué es la Gestión del Ciclo de Vida del Producto y cómo puede beneficiar a la empresa. Por eso, las primeras preguntas se centran en el proceso de Gestión del Ciclo de Vida del Producto, en lugar de centrarse en un producto en particular.
¿Cómo se alinean los objetivos de Gestión del Ciclo de Vida del Producto con la estrategia general de las partes interesadas de la empresa?
¿Qué necesitamos saber sobre la gestión del ciclo de vida del producto?
Utilice esta fase del ciclo de vida del producto para comprender realmente a los clientes de su producto, así como los dolores o frustraciones que su producto aliviará o minimizará.
Pero no te quedes con los clientes: identifica las relaciones que necesitas construir o mantener para crear el producto perfecto para el cliente perfecto al precio perfecto.
Y por último, pero no menos importante, los límites. ¿Qué no crearás? ¿Dónde dejas de diseñar? Establecer límites claros para el resultado de un proyecto (o, en este caso, un producto) puede ahorrarte mucho dinero.
Podrías empezar con un producto mínimo viable y solicitar la opinión de los clientes en la segunda fase. Al decidir esto, debes asegurarte de que los plazos de entrega sean rápidos y que las mejoras se implementen con frecuencia para que la evolución del producto no afecte negativamente la percepción de calidad de tus clientes.
¿Los clientes están identificados y segmentados según sus diferentes necesidades y requerimientos?
¿Existe una descripción completa de los proveedores, insumos, procesos, productos y clientes (SIPOC)?
¿Cuáles son los límites del alcance? ¿Cuándo dejaremos de desarrollar este producto?
【Fase 2】Crecimiento: Medir el rendimiento actual y analizar los resultados.
Ahora que el producto está en el mercado y se están registrando las cifras de ventas, puedes empezar a medir los resultados. Lo complicado es que no todo lo que se puede medir debe medirse necesariamente. Debes elegir las medidas más obvias y adecuadas para tus productos.
Lo que se mide, se gestiona, así que no pases por alto este paso. Asegúrate de responder la pregunta con diligencia y de contar con las capacidades y los recursos para medir los aspectos correctos que te ayudarán a aumentar tus ventas y hacer crecer tu negocio.
Algunas preguntas de ejemplo sobre medición y análisis:
¿Qué medidas se están capturando?
¿Cuál es el costo total en relación con la implementación del producto utilizando la Gestión del ciclo de vida del producto, incluidos los servicios de consultoría o profesionales?
¿Cuáles son sus niveles y tendencias actuales en medidas o indicadores clave del desempeño de productos y procesos que son importantes para sus clientes y que sirven directamente a estos?
【Fase 3】Madurez: Probar e innovar manteniendo el rendimiento del producto.
Nos encontramos en una etapa de madurez. El mercado conoce tu producto. Puedes predecir las cifras de ventas, ya que cuentas con varios años o temporadas de historial en los que puedes confiar. Lo más importante ahora es mantener la trayectoria de ventas en una dirección positiva.
Ahora debe preguntarse sobre la validez del producto en un mercado cambiante. ¿Necesita mejorar el producto o cambiar el mensaje de marketing? ¿Ha surgido un nuevo público para el mismo producto al que pueda acceder?
Algunos ejemplos de preguntas que se pueden hacer son:
¿Qué recursos son necesarios para los esfuerzos de mejora?
¿Qué es lo que realmente hay que mejorar y en qué medida?
Gestión de riesgos: ¿Qué cosas podrían salir mal?
Con el tiempo, llega un momento en que las ventas empiezan a bajar. Has probado todos los trucos posibles para ampliar tu producto: anunciar más, bajar el precio a los clientes, ofrecer productos adicionales, etc.
Si aún desea continuar vendiendo este producto, debe plantearse las preguntas realmente difíciles en relación con su rentabilidad y cómo controlar el entorno en el que está creando y vendiendo el producto.
Llegará un momento en el que tendrás que decidir retirar el producto del mercado y centrarte en nuevos productos o nuevos mercados.
Algunos ejemplos de preguntas que se pueden hacer durante esta fase son:
¿Existe un proceso estandarizado que pueda reducir el costo?
¿Qué puedes controlar?
¿Qué es lo más loco que podemos hacer?
Aunque en teoría parezca un proceso lineal, estas fases se desarrollan a distintas velocidades según el producto. Para cada producto, se plantean preguntas diferentes. Esto ayuda a identificar la etapa de su ciclo de vida y a gestionar toda la cartera de productos. Mientras se identifica la base de clientes para un nuevo producto, otro producto pasará a la fase final de disminución de ventas. ¿Se puede satisfacer una necesidad del mismo grupo de clientes con el nuevo producto?
Comunicar y documentar
Ahora que comprende las preguntas que debe plantearse en cada fase del ciclo de vida del producto, puede ver claramente la necesidad de una documentación sólida. Cada decisión debe registrarse para poder contrastarla posteriormente. Solo cuando todos los equipos de producto creen estos registros, podremos aprender unos de otros y mejorar nuestro ciclo de vida con cada nuevo diseño.
Hora de publicación: 15 de julio de 2019