Aquí se muestra un entorno contaminado típico.

A menudo es difícil obtener un movimiento confiable cuando el entorno operativo está muy contaminado con desechos o contiene condiciones extremas, como un amplio rango de temperatura u otros factores ambientales. El uso de maquinaria para operaciones como corte, soldadura y procesamiento de materiales a menudo genera un cantidad sustancial de contaminación por escombros. Los equipos que no están diseñados para funcionar en presencia de desechos pueden presentar baja durabilidad o fallas prematuras, y pueden requerir servicio o reemplazo frecuentes.

Un componente central en muchos de estos sistemas es algún tipo de dispositivo de actuación lineal. Los actuadores son esencialmente dispositivos mecánicos diseñados para mover y controlar el movimiento. Hay muchos tipos diferentes de actuadores y no se limitan únicamente al movimiento lineal. Un actuador lineal crea movimiento a lo largo de un eje o en línea recta, mientras que un actuador giratorio es un dispositivo que puede crear movimiento alrededor de un eje curvo o circular.

Los actuadores lineales pueden ser especialmente propensos a la contaminación. La contaminación por escombros puede provenir de dos lugares diferentes; ya sea por el funcionamiento del equipo o por el entorno mismo. Las operaciones de proceso pueden generar una gran cantidad de contaminación por desechos. Por ejemplo, esto puede deberse a operaciones de corte, recorte o aserrado que generan partículas, o incluso algo como salpicaduras de soldadura. El esmerilado o el pulido pueden generar partículas finas y el mecanizado puede generar grandes virutas de metal.

El propio entorno también puede generar partículas cuando los escombros o el polvo provienen de un lugar distante. Entonces, si hay una máquina instalada cerca de otra máquina, esa segunda máquina puede ensuciarse debido al propio entorno.

Las formas tradicionales de reducir la contaminación y mantener baja la cantidad de polvo y escombros incluyen cubiertas y protectores o barreras metálicas. Sin embargo, el diseño de los propios elementos lineales puede hacerlos más robustos y más capaces de manejar entornos contaminados. Un ejemplo son las ruedas guía lineales DualVee de Bishop-Wisecarver. Las ruedas guía cuentan con un rodamiento de bolas de contacto angular de doble hilera que proporciona capacidad de carga en múltiples direcciones. Su diseño inherente sella y protege los elementos rodantes internos de contaminantes externos, proporcionando protección incorporada sin necesidad de medidas de protección adicionales.