El primer paso en cualquier proyecto de automatización es definir claramente el objetivo: ¿qué proceso intenta llevar a cabo o qué resultado intenta producir? Una vez definido el proceso o resultado, es hora de profundizar en los detalles de la aplicación para poder elegir los componentes o sistemas adecuados para lograr el resultado deseado de la manera más eficiente y rentable. Documentar los parámetros de la aplicación también le ayudará a comunicar requisitos específicos a proveedores e integradores.
Para definir una aplicación de movimiento lineal, comience con tres preguntas fundamentales:
¿Qué estás moviendo?
¿Hasta dónde lo estás moviendo?
¿Qué tan rápido necesita llegar allí?
Aquí, la pregunta "¿Qué?" se refiere al tipo de carga que se mueve: su masa, forma y tamaño. También defina dónde y cómo se orienta la carga en relación con el sistema de movimiento lineal, y si alguno de estos parámetros cambia significativamente durante el proceso.
Tenga en cuenta que algunas aplicaciones también incluyen cargas axiales (de presión), y estas deben tenerse en cuenta durante el dimensionamiento y la selección de los componentes de la transmisión. Y si la orientación de la carga es vertical o inclinada, se deben tener en cuenta circunstancias especiales, como las fuerzas de pandeo en el mecanismo de accionamiento y la posibilidad de que la carga retroceda (o peor aún, que la carga "caiga") si la energía está perdido.
“Qué tan lejos” significa la carrera, o la longitud del recorrido, y si hay paradas intermedias o cambios en la carrera durante el transcurso del proceso. La cuestión de “hasta qué punto” también conduce a la precisión, definida como exactitud y repetibilidad del posicionamiento, así como requisitos de precisión del recorrido.
“Qué tan rápido” se refiere al perfil de movimiento del golpe. El objetivo podría ser mover la carga a la posición objetivo lo más rápido posible, pero la mayoría de las aplicaciones tienen requisitos específicos para viajar a velocidad constante durante parte del movimiento, para el tiempo de permanencia o incluso para la velocidad o aceleración máxima debido a la naturaleza de la carga o preocupaciones de seguridad. El perfil de movimiento también determinará el par y la velocidad requeridos por el motor y si la aplicación requiere un reductor de engranajes.
Al definir el perfil de movimiento, también se debe definir el ciclo de trabajo. En otras palabras, ¿con qué frecuencia se realizará el movimiento: cuántas veces por minuto, hora o día? El ciclo de trabajo afecta no sólo la vida útil de los componentes móviles, sino que también afecta la cantidad de calentamiento que experimentará el motor durante el funcionamiento y puede tener una influencia significativa en la selección del motor.
Afortunadamente, los fabricantes de componentes de movimiento lineal entienden que dimensionar y seleccionar sus productos puede ser un proceso complicado e intimidante. Para ayudar a los diseñadores e ingenieros a definir la aplicación, varios fabricantes han creado siglas llamativas que detallan los parámetros de aplicación necesarios para el dimensionamiento.
Hora de publicación: 04-ene-2022